Uniformidad de la Remonta y Cría Caballar (parte I)

26.09.2024

Tomás Alonso Marcos, coronel de Caballería (retirado)

Introducción

Con estas páginas, he intentado hacer una recopilación de los uniformes que ha utilizado el personal de la Remonta y Cría Caballar. Para ello, me he apoyado, principalmente, en los reglamentos y cartillas de uniformidad del Arma de Caballería.

Aunque estas líneas tratan de uniformidad, es conveniente recordar que la Cría Caballar se encontraba en España, por diversas razones, en un estado "de notoria postración", (exposición de motivos que se presenta a SM), cuando la reina Isabel II, el 6 de noviembre de 1864, aprueba por real decreto que la dirección y fomento de la Cría Caballar pase a depender del Ministerio de la Guerra.

Entre las medidas que se adoptan, la nueva dirección de la Cría Caballar se hace cargo de los 38 Depósitos de sementales(1) existentes en ese momento. Hasta entonces, y desde 1847, la Cría Caballar dependía del Ministerio de Fomento

(1) "En 1834, se crearon para el fomento equino nacional y dependientes del Ministerio de Gobernación, los Depósitos de sementales -de caballos padres- del Estado, los cuales, habían quedado suspendidos entre 1835 y 1841 debido a la primera guerra carlista. Por real decreto de marzo de 1841, se vuelven a establecer los Depósitos de caballos padres". (Eduardo Agüera Carmona).

En el Arma de Caballería se había intentado solucionar la escasez de caballos constituyendo los escuadrones de Remonta. Se adquirían potros de 2-3 años en ferias, mercados o directamente de los ganaderos, para recriarlos y entregarlos a los regimientos. "Nadie con más elementos que el Arma de Caballería ni con más interés que ella, puede atender al servicio de Cría Caballar". (La vida cotidiana en el Ejército 1855-1925).


Reglamento de uniformidad de 1850

Aunque en el Escalafón General de los Jefes y Oficiales de Caballería de 1845, se menciona la Remonta de Úbeda y la de Baena, no es hasta el año 1850 cuando en el Escalafón General y en el Estado Militar, podemos encontrar referencias a la uniformidad de los escuadrones de Remonta que estaban encuadrados orgánicamente, en el Arma de Caballería.

Según el reglamento de uniformidad para la Caballería, de 27 de marzo de 1850, la fuerza montada de los escuadrones de Remonta de Úbeda y Baena, se hallaba equipada del mismo modo que la de cazadores, sin más diferencia, que la de llevar en las hombreras una corneta bordada en vez del número que usaban aquellos.

La fuerza desmontada usaba chaqueta de paño pardo con cuello y vivos carmesí, calzón sajón de la misma clase con vueltas y vivos de igual color que en la chaqueta, faja encarnada de estambre, chaleco de paño gris celeste, botín alto de cuero blanco, zapato de campo, sombrero negro de hechura calañés con escarapela y capote de monte o anguarina y usaba canana, en lugar de cartucheras.

Este reglamento hace muy pocas referencias a la uniformidad de los oficiales de los escuadrones de Remonta. Los carreros y muleros visten de manera similar a la fuerza desmontada.

A propuesta del Director General del Arma, Ricardo Shelly, el 10 de octubre de 1851 se aprueba un reglamento de uniformidad para los Cuerpos de Caballería sin cambios significativos respecto a lo descrito anteriormente.

Miguel García de la Herrán, coronel de Ingenieros y nieto del Brigadier Miguel García Agustín Ladrón de Guevara, atribuye a su abuelo "la creación del uniforme remontista de sombrero andaluz de alas anchas y chaqueta corta, inspirado en los criadores jerezanos de yeguas y caballos de raza" (El Ejército de los Borbones. Tomo VI).

Fig. 1. Sombrero calañés  Carrero, sección montada de artillería. (Álbum de la Artillería española 1862)
Fig. 1. Sombrero calañés Carrero, sección montada de artillería. (Álbum de la Artillería española 1862)

El sombrero que se menciona en la descripción del uniforme de la fuerza desmontada, debe su nombre a que se fabricaba en la localidad de Calañas, en la provincia de Huelva. "La primera referencia escrita en relación con esta prenda de cabeza, es de 1825. Es un sombrero de ala vuelta hacia arriba y copa más baja y más estrecha por la parte superior, usado por labriegos y gente del pueblo en tiempos pasados" (Cristóbal Llanes Baquero). Años más tarde, se adoptó el sombrero calañés de ala ancha.

En 1851 se crea la Subdirección de Remontas con un escuadrón más, el de Extremadura, y en 1852 se añade el de Aragón. Ese mismo año, la fuerza montada de los escuadrones de Remonta cambió la corneta bordada de las hombreras por las iniciales RG (Remonta General), también bordadas en estambre blanco. En 1857, se denominan establecimientos y pasan a ser: Granada, Sevilla, Extremadura y Aragón aunque a lo largo de los años hubo más cambios en cuanto a su número, ubicación y denominación (Escalafones del Arma).


Reglamento de uniformidad de 1857

Por real orden de 24 de noviembre de 1856, y circulado el 20 de enero de 1857, se aprueba el reglamento de uniformidad para los Cuerpos del Arma de Caballería.

Tropa

En 1857, tanto la tropa de la fuerza montada como la desmontada, utilizan un traje de campo, que el reglamento lo describe así:

Sombrero.- Negro, calañés, con ala ancha y poca vuelta, escarapela encarnada a la izquierda, con presilla de estambre blanco y un botón pequeño de los del uniforme, barboquejo de cinta de seda negra, y cinta igual, alrededor de la copa en su parte inferior.

Fig. 2. Soldado, Remonta. Traje de Campo. Reglamento de 1857. Tomás Alonso
Fig. 2. Soldado, Remonta. Traje de Campo. Reglamento de 1857. Tomás Alonso

Chaqueta.- De paño pardo que llega hasta la parte superior del hueso de la cadera, con solapas, cinco botones grandes en cada una, cuello recto de grana, dos bolsillos exteriores, bocamangas terminando en ángulo algo agudo, con dos botones pequeños y vivo grana alrededor, así como en las solapas, bolsillos y parte inferior de la chaqueta. Los botones, de metal blanco con las iniciales RG.

Chaleco.- De paño gris celeste, con solapa, cuello recto y cinco botones pequeños a cada lado como los de la chaqueta.

Faja.- De estambre encarnado, bastante ancha, y del largo suficiente para que pueda dar tres vueltas a la cintura.

Calzón.- Bombacho, de paño pardo, con vivo grana en los costados y vueltas del mismo color del vivo en el remate de cada pierna de trece (2) centímetros.

(2) La longitud de la vuelta de color grana del calzón, fue variando según el reglamento, 3, 10, 13 o 19 cm, respectivamente.

Las medias, de hilo blanco; bota-botín de cuero blanco de las denominadas andaluzas; zapatos bajos de cuero blanco. Abarcas de cuero sin curtir, para el servicio de piaras y labores de campo.

Espuelas vaqueras para la fuerza montada, con correas de color avellana. Corbatín, un pañuelo negro de seda formando lazada. Guantes, para tiempo frío, de lana mezclilla de color gris tierra.

El cinturón del sable, de cuero de color avellana con hebilla de alambre amarillo; el cordón del sable y la pistonera, también de color avellana

Las Remontas no usaban fornitura, en su lugar, llevaban un cajón de cuero de color avellana en forma de canana, unido al cinturón del sable por dos vaguillas, y con capacidad para diez cartuchos. Su armamento, carabina y sable semi-recto.

Jefes y oficiales

Vestuario para poblaciones, presentaciones etc.:

Chacó, levita, divisas, pantalón, capote, espuelas, espolines, corbatín, guantes y gorra como lo designado para los Cazadores, Escuela General y Colegio de Cadetes, solamente, que en el cuello de la levita y capote, llevaban las iniciales RG bordadas de plata, y las mismas, pero realzadas, en los botones.

Vestuario de campo:

Sombrero.- Negro, bajo de copa, de ala ancha con una cinta de seda alrededor y parte inferior de la copa, barboquejo de la misma cinta, escarapela encarnada a la izquierda y presilla con botón.

Chaqueta.- Larga, de paño azul turquí, cuello vuelto con portezuela, dos carreras de tres botones pequeños en ella, y otras dos de seis grandes en el pecho. Los botones de metal blanco y en relieve una cabeza de caballo con el lema alrededor y por debajo, <<Remontista>>.

Chaleco.- De paño color gris tierra, con dos carreras de seis botones pequeños a cada lado como los de la chaqueta.

Pantalón.- De paño gris tierra.

Espuelas.- Vaqueras como la tropa pero con correas negras.

Corbatín.- Un pañuelo de seda negro.

Bota-botín.- Alta y de cuero negro.

"Manuel Giménez González, dibujante e historiador de la indumentaria militar, finalizó en 1862 la colección de modelos de las Armas y de los trajes usados por las tropas de mar y tierra desde la más remota antigüedad hasta nuestros días, titulada el Ejército y la Armada" (del prólogo de la obra). El manuscrito se publicó en 1982 por el Servicio de Publicaciones del EME.

Fig. 3. Lámina 150. El Ejército y la Armada
Fig. 3. Lámina 150. El Ejército y la Armada

Aunque la lámina 150 (Reinado de Ysabel 2ª. Caballería), de esta publicación, está dedicada en su mayor parte a los Cazadores, las figuras (4, 5 y 6), pertenecen a los escuadrones de Remonta.

                                                           4.- Traje de carrero

                                                           5.- Traje para montar

                                    6.- Traje para la dehesa

Al carrero no se le ve de frente, pero su uniforme es como el de la fuerza desmontada con pequeñas diferencias. La figura 5, refleja el traje de campo a caballo y la 6, debajo del capote de monte, usa una chaqueta de abrigo de bayeta encarnada, y en los pies, peales de lana con abarca de cuero.


Reglamento de uniformidad de 1863

En 1859 se publicaron órdenes de uniformidad que serían recogidas en el reglamento de 1863.

El reglamento para la uniformidad de las prendas de vestuario, equipo, armamento y montura en el Arma de Caballería, de 11 de febrero de 1863, no ofrece cambios significativos en el traje de campo de la tropa de los cuatro establecimientos de Remonta, y así seguirá siendo hasta el reglamento de 1909. Los reglamentos irán describiendo las prendas con más detalle, incluso, añadirán el precio de las mismas.

Como armamento, tercerola rayada y sable igual al de los lanceros, semi-recto, con empuñadura de metal dorado, vaina con dos anillas fijas y regatón.

Jefes y oficiales

Vestuario para poblaciones, presentaciones etc.:

Sombrero.- Negro de fieltro, bajo de copa y con ala ancha, la escarapela es encarnada de lana y la presilla, baja oblicuamente por ella y sirve de divisa del empleo efectivo. Los galones van doblados, de manera que formen una presilla que sale de la parte superior de la escarapela, pasa sobre esta y abrocha en un botón grande de los del uniforme junto a la cinta de la copa del sombrero. Entre los galones de cada lado, 2 mm de distancia de uno a otro y 5 en el centro de la presilla para que pueda distinguirse bien los galones que hay a cada lado que marcan el empleo.

Levita.- De paño azul turquí, abierta, asolapada, con cuello vuelto. Una hilera de siete botones grandes a cada lado del pecho, dos botones de igual clase en el talle y uno pequeño, al costado exterior de cada bocamanga, de cascarilla de plata, de forma convexa y en el centro, las iniciales RG.

Chaleco.- De piqué blanco, con el cuello y solapas del mismo corte que la levita, y dos hileras de siete botones pequeños y planos de hueso forrados de piqué.

Pantalón.- De paño, de color gris tierra con trabillas de cuero negro. Espolines de hierro, de los llamados de tornillo con espiga recta y estrecha de siete puntas iguales colocada como la de las espuelas.

Corbata.- De gro negro liso, con las puntas cuadradas colocada haciendo una doble lazada, dejando ver el cuello de la camisa.

Guantes.- De ante blanco, con dos botones para que cubran la muñeca.

Cinturón de sable.- De charol negro, estrecho, con tirantes sencillos y hebilla para abrocharle debajo del chaleco, por medio de una vaguilla de la misma clase de charol; se pasará por el costado derecho de él una pequeña cartuchera para las cargas del revólver.

Cordón de sable.- De seda azul turquí con bellotas y dos pasadores de la misma seda y plata.

Traje de campo:

Sombrero, levita, pantalón, corbata, cinturón de sable y cordón, como se ha detallado anteriormente.

Chaleco de paño azul turquí, con catorce botones pequeños de los del uniforme, y su hechura como el chaleco de piqué.

Bota-botín, de becerro negro flexible, imitando la bota de montar, se lleva plegada de modo que no suba de la rodilla. Las espuelas, de las llamadas vaqueras, espiga recta, estrella de cuatro puntas grandes y cuatro pequeñas colocada verticalmente y correa de cuero negro.

Guantes, en el tiempo frío, de lana color gris tierra y de ante blanco, el resto del año.

Desde 1866 figuran los Depósitos de sementales del Estado en los Escalafones Generales del Arma.


Reglamento de uniformidad de 1869

Este reglamento fue aprobado el 14 de agosto y circulado el día 26, no hay cambios significativos en el uniforme de la tropa.

En cuanto al traje de campo de jefes y oficiales, señalo alguna modificación:

El chaquetón es de paño azul turquí, con solapas y cuello vuelto, botones grandes de uniforme, cuatro en cada lado y uno pequeño en las mangas, en esta prenda se colocan también las divisas. El chaleco, de paño del color de la chaqueta, abierto, con seis botones pequeños de los de uniforme. El cordón de sable, de pelo de cabra negro.

El traje de poblaciones para su uso en estas y en los actos de servicio en las mismas; levita abierta con las iniciales RG de metal blanco en el cuello y el chaleco de paño azul, cerrado con siete botones pequeños de los del uniforme.